¿Qué es la ecografía?
La ecografía es una forma fácil y no invasiva de ver el interior de su cuerpo. Funciona mediante ondas sonoras (como un radar o sonar).
¿Cómo funciona?
Una sonda o transductor de ultrasonidos conectada a un aparato de ecografía se coloca sobre el área a examinar. La sonda emite ondas sonoras que viajan a través de su cuerpo y rebotan al contactar con cualquier estructura con la que entran en contacto. Las ondas que regresan al transductor luego de rebotar (o ecos) son leídas por la máquina y convertidas en una imagen en la pantalla. Las ondas muestran el tamaño del objeto, cuán lejos se encuentra y que tan denso es. La apariencia de los tejidos varía según su densidad en un espectro que va desde el aspecto líquido, como la sangre al aspecto sólido, como el hueso. Las imágenes son obtenidas en tiempo real, lo que permite a los médicos ver el movimiento del feto y el flujo de la sangre.
Sondas o transductores de ultrasonidos:
Son accesorios que están conectados del aparato de ecografía mediante un cable y que contactan con su cuerpo. Hay muchos tipos de sondas o transductores de ultrasonidos. Se utiliza la que se considere más apropiada según el tipo de exploración. Algunas están diseñadas para colocarse en la superficie del cuerpo, otras están diseñadas para introducirse en la vagina y poder tener una visión más cercana y precisa del contenido de su pelvis o su abdomen.
¿Quién realizará la ecografía?
Su examen será llevado a cabo por un médico, un técnico especializado (un ecografista), personal de enfermería o una matrona entrenada. En la mayoría de los casos solamente habrá una persona presente que realizará la ecografía, aunque en algunas clínicas se ofrece la presencia de una acompañante femenina de la institución para que la paciente se sienta más cómoda. En muchos centros habrá también estudiantes implicados en su examen, supervisados por una persona calificada.
¿Es seguro?
Sí, no existen riesgos conocidos de la ecografía. Las ondas sonoras pueden generan calor al producir pequeñas vibraciones en su cuerpo, pero el calor es mínimo y desaparece rápidamente, aunque podría acumularse si el examen fuera excesivamente largo. Por esto, las ecografías deben ser llevadas a cabo exclusivamente por personal sanitario entrenado.
Una ecografía típica suele realizarse con un gel de ultrasonidos y látex. El látex suele encontrarse en los guantes del examinador o bien en la funda que recubre la sonda. Es importante que comunique a la persona que realiza la ecografía si alguna vez ha tenido una reacción alérgica al gel de ultrasonido o al látex en el pasado. Hay productos alternativos que pueden reemplazar al gel y también guantes y fundas sin látex que pueden utilizarse si fuera necesario.
¿Cómo se realiza la ecografía?
Probablemente se le realicen varias preguntas para confirmar sus datos personales y la indicación de la ecografía. Las preguntas exactas pueden variar, pero se debería confirmar su identidad y si tiene o no alguna alergia.
Una ecografía se lleva a cabo colocando una pequeña sonda sobre su abdomen (una ecografía externa o “transabdominal”) o dentro de su vagina (una ecografía interna o “transvaginal”). En algunos casos ambos métodos son utilizados pero la mayoría de las ecografías ginecológicas suelen ser “transvaginales” pues permiten obtener una información más detallada. Con menos frecuencia y en algunas patologías ginecológicas o pacientes concretas, la ecografía se realizará a través del recto (ecografía “transrectal)
¿Qué implica?
• Ecografía externa (transabdominal)
Para una ecografía “transabdominal” una pequeña cantidad de gel de ultrasonidos se aplica sobre su abdomen. El gel elimina la presencia de aire entre la sonda y la piel, lo que favorece el contacto entre ambas superficies y mejora la calidad de las imágenes. En general no es necesario que se quite la ropa, pero la persona realizando la ecografía necesitará poder acceder a su abdomen, por lo que es recomendable llevar ropa suelta. Su ropa podría ser cubierta para evitar que se manche con el gel. Puede que se le pida tener la vejiga llena ya que esto puede desplazar los intestinos que obstruyen la visualización y mejorar la calidad de las imágenes. En ese caso, deberá beber un poco de agua (unos 2-3 vasos) antes de la ecografía, pero no beba en exceso al punto de sentirse incómoda porque es posible que no pueda ir al baño durante 20-30 minutos. Si tiene necesidad de ir al baño no se preocupe ya que puede comenzar a beber de nuevo justo después de orinar. Debería también comunicar a quien realiza la ecografía si en algún momento está incómoda durante la prueba
• Ecografía interna (transvaginal)
Una ecografía “transvaginal” es un examen interno. Deberá desvestirse de la cintura para abajo, quitarse su ropa interior y cualquier compresa, protector íntimo o tampón. Es por ello que algunas mujeres prefieren llevar un vestido o una falda. A diferencia de la ecografía “transabdominal”, en este caso es necesario que su vejiga esté vacía, por lo que es probable que se le pida quela vacíe antes de este examen. La ecografía “transvaginal” involucra la introducción de una sonda relativamente estrecha en la vagina. La sonda es protegida con una funda limpia descartable (como un condón o preservativo). Se aplica gel de ultrasonidos por dentro de la funda y luego en la punta de la sonda para mejorar el contacto entre las superficies y la calidad de las imágenes. La sonda es lo suficientemente larga como para permitir que el operador de la ecografía pueda moverla fácilmente durante el examen, pero sólo su extremo será introducido en la vagina. La ecografía debería realizarse en una habitación privada. Debería usted comunicar a quien realiza la ecografía si en algún momento está incómoda durante la prueba.
¿Es incómoda?
La mayoría de las mujeres no encuentran las ecografías incómodas. En la ecografía “transabdominal” es necesaria cierta presión de la sonda sobre su abdomen y puede ser molesta cuando la vejiga está llena, produciendo la sensación de que necesita orinar. Una ecografía “transvaginal” puede ser desagradable para algunas mujeres que tengan sensibilidad generalizada o en alguna zona específica de la vagina. Sentir molestias o un leve dolor no implica necesariamente que algo está mal. Si encuentra el estudio desagradable o incómodo, pregunte al operador si puede modificar la forma en la que lo está realizando. En caso de que sea muy doloroso o molesto puede pedirle que detenga el estudio durante unos segundos o incluso que lo finalice.
¿Puedo ver las imágenes durante o después de la ecografía?
En muchos centros los aparatos de ecografía tienen una única pantalla. Dicha pantalla se orienta hacía quien realiza el examen y puede que le sea difícil ver. Normalmente la pantalla puede girarse para mostrarle imágenes o vídeos.
Pregunte al operador si desea ver algo en particular. Si desea guardar una foto para usted puedes preguntarlo antes del examen. No siempre es posible y puede que en algunos centros tenga un pequeño costo.
¿Recibiré los resultados del estudio en el momento?
No necesariamente. Las ecografías a veces son informadas inmediatamente después de terminar el examen, pero otras veces pueden demorar más tiempo. Esto dependerá de la organización del servicio donde usted se atiende y puede variar entre los diferentes centros.
Última actualización: octubre 2022